Hollie Breaux Mallet, una mujer de Luisiana (Estados Unidos) descubrió en la grabación de la cámara de seguridad de su hogar que alguien estaba entrando en su casa. No para robar, ni para fisgar: solo se acercaba unos segundos cada día para abrazar a su perra. Y tan rápido como entraba, se iba.
En el vídeo se puede ver que el caco era un niño, que incluso llegaba al jardín de Hollie en bici. Sorprendida y encantada por la amorosa conducta, la mujer decidió compartir el clip en Facebook, pidiendo ayuda para localizar al visitante con las siguientes palabras.
A continuación, la madre enseñó el vídeo a Josh y compartió su reacción “Esta rojo como un tomate”, a lo que Mallet contestó “ahhh, Ginger, espero que no le dé mucha vergüenza, dile que lo siento que solo quería encontrarle, y que espero que vuelva pronto”.
La respuesta del niño no pudo ser más positiva, y así la describió la madre: “Está fenomenal. Tiene una gran sonrisa en la cara y me ha dicho “sabes que me encantan los perros, mamá”.
La señora Mallet estaba encantada de haber descubierto a su inesperado invitado y así lo hizo saber a todos sus amigos de Facebook con este mensaje:
“Me alegro de ver que la cámara ha grabado inocencia y amor en vez de lo que normalmente suele grabar. No me puedo creer todas las visitas que esta publicación ha tenido. Me alegro de que se haya grabado esta dulzura”.
Pero lo más emocionante es el motivo por el que Josh se acercaba a Duchess. Según explica su madre en la misma red social, el niño estaba muy unido a Bella la perrita con la que vivió desde que él cumpliera los dos años de edad. Lamentablemente, la mascota falleció el año pasado, y desde entonces Josh la echa terriblemente de menos:
“Tuvimos a nuestra perra Bella desde que Josh tenía dos años, pero murió el año pasado. Hemos estado muy ocupados y Josh tiene muchas actividades extraescolares, así que no nos hemos lanzado a asumir la responsabilidad de tener un nuevo cachorro. Pero espero que pronto podamos”, escribe la madre.
El pequeño estaba tan necesitado de tener un perro que se colaba en casa de su vecina para poder jugar y abrazar a uno, aunque solo fueran unos segundos. Esperemos que después de conocerse su historia su madre le pueda conseguir uno: se lo merece.
es.noticias.yahoo.com
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